Élder D. Todd Christofferson, miembro del Cuórum de los Doce Apóstoles, inició una gira por El Salvador los días 9 y 10 de febrero de 2019. Durante las diferentes reuniones que sostuvo, estuvo acompañado de su esposa, Kathy. También participaron en esta gira el élder Carlos A. Godoy, de la Presidencia de los Setenta, y su esposa, Mónica; el élder Juan A. Uceda, presidente del Área de Centroamérica, junto a su esposa, María Isabel; así como otros líderes locales.
Al dirigirse a las familias de la Estaca El Salvador Soyapango, élder Christofferson afirmó que la Primera Presidencia ha visto un “progreso impresionante” en los miembros de la Iglesia y ha notado “un entusiasmo y un gran esfuerzo por dedicar más tiempo a sus estudios de las escrituras”.
El nuevo modelo de aprendizaje en el hogar, llamado Ven, sígueme, que se utiliza desde este año, permite realizar un estudio personal y familiar de las escrituras.
Con base en su experiencia personal, élder Christofferson enseñó que si las familias son perseverantes en sus esfuerzos por aprender y vivir el Evangelio en el hogar, sus hijos serán bendecidos. Relató la experiencia de cuando él y su esposa, Kathy, trataban de enseñar a sus niños a tener el hábito de leer las escrituras:
“Juntos estudiábamos el Libro de Mormón y logramos experiencias espirituales. A veces había quejas; uno u otro dormitaban, pero lo más importante es que éramos consistentes en hacerlo”.
Élder Christofferson usó la escritura que se encuentra en DyC 18:34–35 para explicar lo que lograron a través de esos esfuerzos constantes. “Estas palabras no son de hombres, ni de hombre, sino mías; por tanto, testificaréis que son de mí, y no del hombre. Porque es mi voz la que os las declara; porque os son dadas por mi Espíritu, y por mi poder las podéis leer los unos a los otros; y si no fuera por mi poder, no podríais tenerlas”.
“Nuestros hijos aprendieron así a reconocer la voz de Cristo... Han aprendido a ser más independientes espiritualmente y pueden recibir la voz de los cielos; siento que es lo mejor que he hecho como padre de familia”.
Élder Christofferson pidió a los miembros de la Iglesia que recordaran el valor que cada uno tiene ante los ojos de Dios. “El Padre Celestial siempre estará con ustedes. No son olvidados y para Él, ninguno es extranjero. Él los ama a cada uno y con la Resurrección sus promesas son válidas”.
En todo momento insistió en la necesidad de buscar la guía del Espíritu para enseñar en el hogar y estar preparados para la segunda venida del Señor. “Para poder recibir a Cristo, tenemos que ser un pueblo recto; esto solo es posible al aceptar la invitación de seguir a Cristo y perfeccionarnos en Él”.
Consejos para ser mejores líderes
“El servicio es algo sagrado y el tiempo y esfuerzo que disponemos (para nuestros llamamientos) son una ofrenda para el Señor”, dijo élder Christofferson. Citó al apóstol Juan, en el Nuevo Testamento, para enseñar que todos los líderes de la Iglesia han sido llamados con un propósito sagrado. “No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé” (Juan 15:16).
Al referirse a los frutos de los que habla la escritura, explicó que se pueden observar cuando ayudamos a los hijos de Dios a centrarse en el sendero de los convenios. “Los frutos siempre son las ordenanzas. El fin siempre es el templo”.
Élder Christofferson recordó que en todo tiempo es necesario tener revelación, y animó a todos a buscarla constantemente. Además aconsejó a los líderes a que aprendan a delegar responsabilidades.
“Estar ocupado no debe ser nuestro enfoque o el fin de lo que hacemos en nuestros llamamientos”, dijo. En otra reunión, con miembros del sacerdocio, le preguntaron ¿qué consejos se pueden seguir al momento de delegar? En respuesta, el apóstol dijo que se requiere paciencia.
“Es probable que al inicio, delegar requiera un seguimiento constante, una capacitación previa y… tiempo”. No obstante, “si aprendemos a ser pacientes y a seguir estos principios, en poco tiempo nos daremos cuenta de que estamos formando líderes y teniendo más tiempo para ampliar el enfoque de lo que estamos logrando”, concluyó.
“De cosas pequeñas y sencillas”
La hermana Kathy Christofferson habló del crecimiento que ha tenido la Iglesia en todo el mundo. “Por medio de cosas pequeñas y sencillas se realizan grandes cosas” (Alma 37:6), dijo, para recordar que hace casi dos siglos, en 1830, sólo había seis miembros.
“Cuatro años después, el profeta José Smith reunió a todos los que tenían el sacerdocio en una pequeña escuela hecha de troncos; era muy pequeña, tal vez de poco más de cuatro metros cuadrados, pero en ella se reunió todo el sacerdocio de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días que se encontraba en el pueblo de Kirtland [Ohio]. Una vez que se juntaron, el Profeta pidió a todos los élderes que compartieran su testimonio de esta obra y cuando terminaron él dijo: ‘Concerniente a los destinos de esta Iglesia y reino, [ustedes] no saben más que un infante en los brazos de su madre. No lo comprenden… Lo que ven aquí esta noche no es más que un grupo muy pequeño del sacerdocio, pero esta Iglesia llenará el norte y el sur de América; llenará el mundo’. Ahora vemos el cumplimiento de lo que el Profeta dijo en una Iglesia que inició con seis miembros y ahora con más de 16 millones de miembros en más de 120 países del mundo”.
Cómo proteger a las familias
Élder Carlos A. Godoy, de la Presidencia de los Setenta, dijo: “En la última Conferencia General, el presidente Russell M. Nelson nos enseñó que el adversario está aumentando su ataque sobre la fe y las familias. Para ello el Señor ha revelado una estrategia: Ven, sígueme es el plan centrado en el hogar, y… este nuevo plan de estudio coloca poder y protección en cada hogar, en cada familia. No debemos complicarnos para ejecutarlo. El primer paso es tan fácil como abrir el manual”.
Ver a la manera del Señor
Élder Juan A. Uceda, Setenta Autoridad General y presidente del Área de Centroamérica, aconsejó: “Al hablar de la ministración debemos recordar que este nuevo enfoque, más santo y elevado, tiene que ver con cuidar las preciosas almas de los hijos de Dios. Al ministrar debemos abrir nuestros ojos espirituales; ver como Dios ve a sus hijos”.
También recomendó un cambio de actitud para el día de reposo: “Si cambiamos nuestra actitud ante el domingo preparándonos un día antes, invitando a la revelación y arrepintiéndonos antes de participar de los emblemas, haremos que la Santa Cena sea un instante en el cielo para reunirnos con Dios”.
La mira puesta en el templo
Élder Luis Arbizú, Setenta Autoridad de Área, enfatizó en que “debemos cultivar el poder de ser íntegros en nuestros corazones. El templo debe ser una parte importante de nuestra vida. A medida que nos esforzamos por tener una recomendación vigente para el templo y la usamos para gozar de las ordenanzas de Dios, entonces nuestra habilidad para cuidar a otros crece”.
¡Haz los cambios hoy!
Nestor Bonilla, presidente de Estaca El Salvador Soyapango, animó a los miembros a tomar decisiones de inmediato. “Hoy es un buen día para decidir y comenzar una nueva vida, al efectuar cambios en nuestros corazones y hogares. Así como el Señor dijo al pueblo de Israel, ¡ustedes serán un pueblo santo! Así que ¿qué nos impide serlo? Este evangelio nos permite arrepentirnos y cambiar”.