'Cuando oramos y leemos las escrituras el Espíritu Santo viene, nos protege y nos guía'
En el centro de la estaca Los Héroes, El Salvador, el élder Gerrit W Gong, de la presidencia de los setenta y su esposa; el élder Jorge Zeballos, consejero de la presidencia de área y su esposa; y el élder Luis Ricardo Arbizu de los setenta y su esposa se dirigieron a jóvenes y sus padres.
Hermana Zeballos: Mi esposo y yo somos conversos, los únicos miembros de la Iglesia de parte de nuestra familia. Cuando yo recibí las lecciones de los misioneros hubo dos principios que tocaron mi corazón y me confirmaron que esta era su Iglesia. El primero es que Dios me conoce por mi nombre, que no soy un número más. En realidad Él me ama. El segundo que la familia no termina con la muerte, sino que esa relación puede perdurar para siempre. Yo entendí que no hay otra forma de hacer una familia si no es en el templo. No importa lo que cueste la meta, siempre debe ser el templo. Un lema que tenemos es: “recuerda quién eres”. Es más fácil saber qué debemos llegar a ser cuando entendemos quienes somos.
Preguntas y respuestas con el élder Gong
El élder Gong motivó a los jóvenes a expresar las inquietudes que tuvieran. Durante estas preguntas, las autoridades que lo acompañaban expresaron consejo y respondieron las dudas de los jóvenes. Algunas de estas preguntas y sus respuestas son:
P. ¿Cuál es la mejor forma para prepararse espiritualmente?
Élder Zeballos: Ir a seminario, participar activamente en las reuniones de los jóvenes, estudiar las escrituras, en especial el Libro de Mormón, tener fe y ser obediente al consejo de los líderes, son algunas sugerencias. Como jóvenes deben aferrarse constantemente al evangelio, no solamente una vez sino todos los días en todo momento. Es importante conversar con nuestro Padre Celestial a través de la oración sincera.
P. ¿Cuál fue la prueba más dura en la misión y como hizo para superarla?
Hermana Gong: Yo serví mi misión en Taiwán. Para mí la prueba más difícil fue llevarme bien con una compañera, teníamos caracteres distintos, pero logramos superar las diferencias a través de la oración. Debemos entender que Dios ama a todos sus compañeros y Él puede enseñarnos a amarlos también.
Élder Zeballos: Me cuesta pensar en una situación desafiante en mí misión, pero tengo una situación similar a la de hermana Gong con un compañero difícil. Lo resolvimos a través del diálogo y poniendo nuestras diferencias ante el Señor, luego de hablar al respecto, tuvimos una relación maravillosa.
Élder Gong: Recuerden que el Libro de Mormón enseña que debe haber una oposición en todas las cosas, en cada situación desafiante debemos ver una oportunidad de crecer. Las pruebas tienen la finalidad de ayudar a que nos elevemos.
P. ¿Cómo puedo dejar de ser tímido y compartir el evangelio?
Hermana Zeballos: La mejor manera de predicar es con el ejemplo, es probable que muchos nos vean diferentes, pero debemos enseñar por qué lo somos y esa es la oportunidad de enseñar el evangelio.
Élder Zeballos: A veces somos rechazados por nuestro deseo de enseñar la verdad, debemos invitar al Espíritu Santo para que nos ayude a predicar a otros, debemos ser naturales al enseñar.
P. ¿Cómo me preparo para servir una misión, siendo el único miembro de la familia y sin el apoyo de mis padres?
Élder Zeballos: Cuando decidí ir a la misión estuve en la misma situación. Era el único de la familia miembro así que para contarles de mi decisión decidí orar a fin de prepararme. Mis padres aceptaron mi decisión y me apoyaron finalmente.
La preparación incluye una serie de factores, la preparación debe ser integral. Hay que preguntarse en este momento en qué parte de mi preparación estoy y no postergar. Debemos ser capaces físicamente, hacer ejercicio, trabajar y ahorrar; es importante la preparación espiritual porque es la esencia del servicio, pero no podemos descuidar los demás factores.
P. ¿Cómo puedo vencer la tentación?
Élder Gong: Una manera eficaz es la oración, debemos tener una relación estrecha con Dios. En la misión es importante escuchar a nuestro presidente de misión, amar y estar cerca de nuestro compañero. En general debemos estar enfocados en compartir el evangelio. Si nuestro enfoque está en las cosas buenas, el adversario no tiene cabida.
Hagan una cosa a la vez, entonces cada día será un buen día, cada semana una buena semana y así sucesivamente. Respecto al matrimonio, no hay nada más maravilloso que una mujer y un hombre digno se sellen en un templo. Manténganse limpios y puros, mantengan sus metas altas, mantengan esa bendición – el templo - en su vida.
P. ¿Cómo podemos saber si la persona con la que nos queremos casar es la persona correcta?
Hermana Zeballos: Cuando vi por primera vez a élder Zeballos, destaqué lo puro que era, lo diferente que era a otros jóvenes. Cuando la persona ama más al Señor que a uno, esa es la persona.
Élder Zeballos: Elegir a la persona con la que te cases debe ser una confirmación espiritual, debe ser una experiencia por medio del Espíritu Santo. De todas mis decisiones hay dos trascendentales en mi vida: la primera es seguir al Señor sobre todas las cosas, la segunda con quién me casé. Es importante que ustedes jóvenes piensen que la segunda decisión podría afectar la primera: su deseo de seguir al Señor.
Élder Gong: La sección 8, versículo 2 de Doctrina y Convenios nos enseña con quién casarnos, qué estudiar, dónde trabajar y otras cosas que deberemos hacer.
Si solo sienten algo en su mente, o si solo lo sienten en su corazón es incorrecto; pero si lo sienten en ambos lugares al mismo tiempo esa es la decisión correcta. Piénsenlo una y otra vez en su mente. Dios espera que hagamos todo lo que podamos, y luego por el poder del Espíritu Santo, Él puede enseñarnos.
Es importante aprender que a veces Dios contesta preguntas que no hemos hecho. Si estamos alertas podremos recibir constante revelación en nuestras vidas. Si ustedes guardan los mandamientos, serán dignos de recibir revelación, si están en un lugar reverente, y si están tratando de ser limpios, entonces el Espíritu Santo estará con ustedes.
Élder Luis Arbizu: Cuando hacemos preguntas inspiradas, el Señor nos da revelación personal. En las escrituras encontramos muchas revelaciones que vinieron de una pregunta sencilla pero sincera. Debemos buscar las cosas que debemos dejar de hacer, y buscar otras que Dios quiere que hagamos.
Palabras finales por el élder Gong:
Estamos contentos que ustedes hagan historia familiar, les motivamos a hacerlo siempre, esa es la manera en que vamos a sellar a las familias. Por favor aprendan lo más que puedan. En este mundo competitivo entre más puedan hacer, el Señor les dará más para que puedan servirle. El mundo en el que vivimos es lo que llamamos los años de aceleración. Las cosas van más rápido. Aquellos que tendrán un futuro más brillante son los que aman aprender, son los que están dispuestos a hacer nuevas cosas, inclusive cosas antiguas, pero de nuevas maneras.
A estos cambios, en la Iglesia les llamamos revelación e inspiración. El Espíritu Santo puede traer todas las cosas a nuestra mente, pero Él también puede decirnos todo lo que necesitamos saber en el futuro. Guarden sus convenios bautismales, recuerden lo que prometen cada domingo en la Santa Cena. Cuando somos limpios y puros tenemos el Espíritu Santo. Cuando oramos y leemos las escrituras el Espíritu Santo viene, nos protege y nos guía. Tener un templo cerca es una bendición, usen esta hermosa casa para acercarse al Señor. Ustedes son los hijos de Lehi, y las promesas de sus padres son sus promesas.